Las Arenas. El origen de una Playa con tradición
Desde siempre, cuando los valencianos de la ciudad pensábamos en ir a la playa, lo hacíamos poniendo nuestra mirada en la playa de las Arenas, era la zona mas cercana y preferida, pero también hay otras buenas playas en Valencia.
Desde Nazaret hasta la Patacona hay diferentes barrios que se diferencian entre si, por su forma de vida y costumbres.
Primero esta Nazaret, al otro lado del puerto, se llegaba a ella por otro camino «el camino de las Moreras» y tenia una pequeña playa con merenderos de los mismos pescadores, donde estaba, el balneario de Benimar, aunque toda esta playa desapareció con la ampliación del Puerto de Valencia.
Luego viene la zona de las Arenas, la Malvarrosa y el Cabañal-Cañamelar (este ultimo era una zona totalmente dedicada a la pesca) y por finalmente la Patacona, que aunque ésta, ya pertenece a Alboraya, que por entonces era zona Industrial, aunque tenia una pequeña playa que disfrutamos poco los valencianos de la capital.

Las Arenas y la Malva-rosa han nacido de la conjunción del mar y de la huerta, como una prolongación del Cabanyal y de la huerta de la Carrasca, Alboraia y Benimaclet. Delimitada por las acequias de la Cadena y de Vera, Malva-rosa fue incluso hasta mediados del XIX una zona muy húmeda, prácticamente un marjal, de modo que hasta principios del siglo XX su avenida estaba recorrida en su totalidad por una acequia donde jugaban los niños y podían caer los carros que circulaban por ella.
Ese carácter húmedo e insalubre fue precisamente lo que originó su nombre. Con la idea de sanear la zona, un botánico francés, ayudante del director del Botánico, atisbó las inmejorables condiciones del terreno para su explotación agrícola. Compró 360.000 metros cuadrados, sembró en él varias especies de flores, como jazmines, rosas y, especialmente una especie de geranio al que bautizó como malva-rosa y convirtió prácticamente todo el barrio en propiedad particular suya, montando en 1865 un establecimiento de horticultura llamado precisamente Malva-rosa.
Don Felix Robillard fue el botánico que favoreció el nacimiento del barrio gracias al cultivo de geranios para su fábrica de esencias.
A este hombre se debe el nombre el barrio de la Malvarrosa, se afincó en Valencia en 1848 tras ser nombrado jardinero mayor del Botánico. En Valencia impulsó el cultivo a escala industrial de la malvarrosa (planta) y puso en funcionamiento una fábrica de esencias pionera.
Y es que además de tratarse de una bella flor con pétalos de color rosa o lilas (en muchos casos éstos pueden ser blancos o amarillos), la malvarrosa sirve para elaborar infusiones y jarabes para paliar alguna dolencia leve, y jabones y aceites para cuidar nuestra higiene y bienestar personal (y es que sus flores, tallos y hojas son muy aprovechables tanto a nivel visual como funcional).

El Asilo-Hospital de San Juan de Dios (hoy, Valencia al Mar) fue construido porque su cercanía al mar proporcionaba abundantes dosis de yodo para curar a los escrofulosos, igual que el Sanatorio Marítimo, concebido en principio como Casino de un gran conjunto residencial planificado por el arquitecto Francisco Mora.
La Malva-rosa se unió con el Cabanyal con la línea férrea que desde las canteras del Puig hasta el puerto transportaba la piedra de rodeno que se necesitaban para construir la escollera.
En 1902, y buscando una tranquila soledad, Blasco Ibáñez construyó aquí su chalet. Deambulando por la playa conoció a Sorolla, cuando ambos ya estaban empezando a cimentar su fama. Después de la guerra del 36 y hasta su deterioro debido a las sucesivas riadas de 1949 y 1957, el chalet se convirtió durante varios años en Escuela de Flechas Navales.
Curiosamente, antes que Manises, el campo de aviación de Valencia fue la Malva-rosa, en la extensión de playa que iba desde las Arenas hasta el chalet de Blasco. Ahí se iniciaron los primeros certámenes de aviación, nacidos sobre todo bajo la sombra de la Feria de Julio.
Tenemos que hacer mención a Antonio Sanchis ya que parte de la información de este artículo la hemos sacado gracias a sus investigaciones


En los últimos años, toda la zona de la playa ha cambiado mucho, se construyó el paseo y se dió paso a la remodelación del puerto con motivo de la Americas’s cup.
Ha beneficiado mucho al turismo con el que contamos ahora en Valencia y concretamente en la zona de la playa de las Arenas donde se situa el Hotel Balandret.
El hotel restaurante Balandret nos muestra la esencia de Valencia, la luz del mediterráneo, esa luz que tan bien supo captar Sorolla en sus cuadros y que el interiorista Carlos Serra de Mercader de Indias ha sabido plasmar en el salón del restaurante de este hotel Boutique y en cada una de sus 21 habitaciones.
El famoso cuadro del pintor valenciano, El Balandrito, que fue pintado en las playas que hay frente al hotel y que da nombre al mismo, está muy presente en el impresionante salón del restaurante, donde a través de cuatro grandes esculturas verticales podemos reencontrarnos con esa imagen que todos recordamos del niño jugando con su barquito y que junto a dos impresionantes murales formados por botijos convierten este salón en todo un homenaje a la cultura valenciana
Como curiosidad, comentarte de la existencia de un Blog donde ver gran cantidad de fotos antiguas de las playas de la ciudad de Valencia.
Es el Blog de Juanansoler y queremos hacerle una mención especial por la calidad del material fotográfico


Autobuses para llegar a las playas de Las Arenas y la Malvarrosa de Valencia:
Valencia cuenta con líneas que durante todo el año llegan desde el centro de la ciudad hasta las Playa de las Arenas.
- 1 ‘Estación de Autobuses – Malvarrosa’
- 2 ‘La Malva·rosa – Campanar’
- 19 ‘La Malva·rosa – Pl. Ajuntament’
- 20 ‘Cid – Marina Real/Platges’
- 31 ‘La Malva·rosa – Poeta Querol’
- 32 ‘Passeig Marítim – Marqués de Sotelo’
- N1 ‘Pl. Ajuntament – La Malva·rosa’ (Nocturno)
- N9 ‘Pl. Ajuntament – Cabanyal’ (Nocturno)
¿Ya sabes donde vas a celebrar el Fin de Año?
Reserva en el Hotel en Valencia Balandret
(agotadas las reservas de Navidad, últimas mesas para NocheVieja)